De Targa Wassay a las grandes ligas de las MMA: una historia de superación, identidad y lucha sin fronteras
Nacido el 19 de octubre de 1992 en Targa Wassay, una pequeña localidad de la región de Guelmim, en Marruecos, Rachid El Hazoume Aamay representa un símbolo de perseverancia y multiculturalidad en el mundo de las artes marciales mixtas. De nacionalidad hispano-marroquí, creció en Las Palmas de Gran Canaria, en las Islas Canarias, donde comenzó a forjarse el carácter y la disciplina que lo han llevado a competir en las ligas más exigentes del planeta.
Hoy, con un sólido récord profesional de 15 victorias y 4 derrotas, Rachid no solo se ha ganado el respeto de la comunidad internacional de MMA, sino que también se ha convertido en un orgulloso embajador de tres tierras que lleva en el corazón: Marruecos, España y Canarias.
Los primeros golpes en casa
El viaje de Rachid en el mundo del combate comenzó a los 14 años, cuando ingresó en un gimnasio de Las Palmas para entrenar kickboxing bajo la tutela del entrenador Michael Gotera. No tardó en ampliar sus horizontes hacia el Brazilian Jiu-Jitsu (BJJ), entrenando con el profesor Thiago Martins en el gimnasio de Juan Francisco Espino Diepa, otro referente canario en los deportes de contacto.
Fue allí donde se sembraron las semillas de lo que hoy es una carrera profesional consolidada. Con el paso de los años, el cambio de entrenador y la llegada de Bechir Hamuda marcaron un punto de inflexión: Rachid evolucionó como luchador y comenzó a alcanzar títulos regionales y nacionales, forjando una reputación en el circuito amateur.
De amateur a profesional: el salto definitivo
Tras un brillante recorrido como amateur, donde logró un récord de 7 victorias y una sola derrota en MMA, Rachid debutó como profesional a los 18 años. Desde entonces, ha vivido entre tatamis y jaulas, compitiendo en países como España, Francia, Alemania, Inglaterra, Abu Dabi, Tailandia, Arabia Saudí, Brasil y México.
Su vida se convirtió en un viaje constante de aprendizaje y adaptación, residiendo por temporadas en Inglaterra, Estados Unidos, México y Tailandia, siempre con un objetivo claro: perfeccionar su técnica y crecer como atleta.
Actualmente, forma parte de la prestigiosa liga PFL (Professional Fighters League), una de las competiciones de MMA más importantes del mundo, y continúa abriéndose camino entre los mejores del planeta.
Palmarés de un guerrero
A lo largo de su carrera, Rachid ha acumulado un impresionante historial de títulos, tanto en disciplinas de golpeo como en grappling y BJJ:
- 🥇 Campeón de España de MMA (2011)
- 🥉 Tercer lugar en el Campeonato de España de MMA (2013)
- 🥇 Campeón de España de Kickboxing (2011, 2015)
- 🥇 Campeón de España de Thai Boxing (2011)
- 🥇 Campeón de Europa NAGA (2017)
- 🥇 Campeón de España BJJ Cup (2021)
- 🥉 Medalla de bronce en Grappling Gi FILA España (2021)
- 🥇 Campeón de Canarias de Kickboxing, Thai Boxing y Full Contact (2011)
Estos logros reflejan no solo la versatilidad de Rachid como peleador, sino también su capacidad de adaptarse a diferentes estilos, culturas y escenarios de combate.
Más que un luchador: un mentor, un compañero, un referente
En marzo de 2025, Rachid se trasladó a Ciudad de México para apoyar a su amigo y compañero José Daniel Medina “Chicho”, peleador de UFC, en su preparación para UFC México. A más de 2.400 metros de altitud, ambos ajustan cuerpo y mente para afrontar los retos del octágono. Rachid no solo lucha por él, sino también por quienes lo rodean, aportando su experiencia y energía en cada rincón del camino.
Identidad, valores y futuro
“Salir de casa es la única forma de salir de la zona de confort”, afirma Rachid con convicción. Su trayectoria es prueba viviente de que los sueños de un niño que creció entre Marruecos y Canarias pueden convertirse en realidad si se acompañan de sacrificio, humildad y trabajo diario.
Hoy, desde las grandes ligas, sigue representando con orgullo las banderas de Marruecos 🇲🇦, España 🇪🇸 e Islas Canarias 🇮🇨, levantándolas en cada país al que viaja. Inspirado por su fe y agradecido por cada oportunidad, Rachid El Hazoume Aamay mira hacia el futuro con la firme intención de abrir camino a las próximas generaciones, demostrando que con disciplina, identidad y pasión, no existen fronteras.